Se rumorea que Max Verstappen recibirá una penalización en la parrilla durante el próximo GP de Bélgica. Se espera que el neerlandés utilice su quinto motor de la temporada en Spa. Como esto va en contra de las reglas de la FIA, el tricampeón del mundo deberá pagar de todos modos con una penalización de diez posiciones en la parrilla por un nuevo ICE.
En la preparación para el GP de España, Red Bull equipó el coche de Max Verstappen con una nueva unidad de potencia, la cuarta de la temporada. El motor de combustión, el turbo, el MGU-H y el MGU-K eran completamente nuevos en ese momento. Con esto, el tricampeón del mundo alcanzó su límite. Si Verstappen utiliza un quinto motor en 2024, la FIA se verá obligada a darle una penalización de diez posiciones en la parrilla.
Posible cambio de motor para Verstappen
Verstappen ya tenía un motor nuevo en su coche durante el Gran Premio de Canadá, pero este fue sacrificado después de la segunda sesión de entrenamientos libres. Aún está por ver si ese modelo puede seguir siendo útil para él, ya que los motores antiguos pueden ser reutilizados indefinidamente.
Penalización en la parrilla en Spa
No es ilógico que Verstappen quiera recibir una penalización en la parrilla precisamente en Spa. En los últimos dos años, el holandés también tuvo que ceder varias posiciones en Bélgica. En 2022, cayó de P1 a P14 porque había instalado un nuevo motor en su coche. En 2023, volvió a marcar el tiempo más rápido en la clasificación, pero comenzó desde P6 debido a un cambio de caja de cambios. Como adelantar en Spa es relativamente fácil, en ambas ocasiones logró ganar.
Aún está por ver si podría repetir ese truco este fin de semana. La competencia es, después de todo, mucho más amenazante que en años anteriores. Sin embargo, esperar a instalar un nuevo motor no es realista. Después del receso de verano, Verstappen tiene una carrera en casa en Zandvoort, donde obviamente no quiere arriesgarse a una penalización en la parrilla.