Para Franz Tost, la elección fue sencilla cuando los líderes de Red Bull le preguntaron su opinión sobre quién podría suceder al colega de Max Verstappen, Sergio Pérez. El ex director del equipo de formación recomendó a Yuki Tsunoda, el japonés que probablemente se subirá al RB21 después de dos carreras en 2025.
En retrospectiva, los responsables de las actividades de Fórmula 1 de Red Bull han sido muy indulgentes con Nyck de Vries. El piloto de Frisia comenzó en 2023 con grandes expectativas en su año debut en la Fórmula 1 con el equipo satélite AlphaTauri, pero fue despedido después de diez Grandes Premios y una serie de actuaciones decepcionantes. En Red Bull, a excepción del último año con Sergio Pérez, no suelen mostrar misericordia.
Liam Lawson lo sabe todo al respecto, si es que no lo sabía ya. Después de dos malas carreras, parece que el tiempo del ‘novato’ neozelandés en el equipo de carreras, aunque aún no se ha confirmado oficialmente, ya ha terminado. Evaluado y considerado insuficiente. Dos veces último en la clasificación, cero puntos en el Campeonato del Mundo. No se le concedió más tiempo. Lawson regresa al equipo de formación Racing Bulls, Tsunoda toma el camino opuesto. Esperemos que todo vaya bien…
Red Bull condenado
Aparte del daño a su reputación, ya que Red Bull está siendo condenado a nivel mundial por la decisión ultra rápida de despedir a un joven piloto tan rápidamente, parece que la dirección ha sufrido un ataque de pánico. Sin embargo, esta vez hay consenso sobre la elección sorprendente, un consenso que inicialmente no existía en la elección de Lawson. Esa decisión fue tomada por el director del equipo y CEO, Christian Horner.»El británico no consideró a Tsunoda lo suficientemente bueno, demasiado salvaje y con insuficiente feedback, para llenar el vacío dejado por Pérez. Ahora sí, con la bendición del proveedor de motores Honda, el principal accionista tailandés de Red Bull y el asesor Helmut Marko. Por otro lado, se dice que Max Verstappen abogó por darle a Liam Lawson al menos otra oportunidad en Japón, en una semana y media, en un circuito que conoce a diferencia de Melbourne y Shanghai. Pero incluso esa recomendación colegial no pudo prolongar la vida de Lawson en el equipo madre.
Fracaso de Lawson
Los tomadores de decisiones de Red Bull probablemente basaron su dura medida en la última carrera en China, el pasado domingo. Lawson no pudo hacer nada en la clasificación en el RB21, un coche bastante impredecible que se ajusta más al gusto del líder y estrella Verstappen, terminando último, al igual que una semana antes en Melbourne. Por eso, el coche fue modificado y ajustado a los deseos y estilo de conducción de Lawson antes de la carrera. Sin embargo, la dirección no vio suficiente mejora. Y para evitar una repetición y un largo debate como el del año pasado sobre la permanencia de Pérez, a quien se le dio mucho margen para los estándares de Red Bull, esta vez se tomó una medida drástica. Menos costosa que con Pérez, quien recibió una indemnización de millones tras la rescisión de su contrato.
Lawson está mentalmente agotado, Yuki Tsunoda ahora tiene la oportunidad de demostrar si puede mantenerse dentro de un margen razonable de Verstappen: una tarea infernal. El campeón del mundo ya ha dejado en la cuneta a varios compañeros de equipo (Daniel Ricciardo, Pierre Gasly, Alex Albon, Pérez y Lawson). ¿Será Tsunoda el siguiente? En ese caso, podría costarle su carrera en la Fórmula 1 al popular japonés. Pero, ¿es eso una preocupación para Red Bull? Probablemente no: allí solo prevalece la ley del más fuerte.
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